Recientemente, la aerolínea Flybondi intentó censurar el sitio web flybondi.fail, creado para registrar los retrasos y cancelaciones de sus vuelos, lo que resultó en un “efecto Streisand” al hacer que la página se hiciera aún más conocida. Ante la intimación legal que recibieron los desarrolladores del sitio para cesar el uso de la marca registrada “Flybondi”, la web cambió su dominio a failbondi.fail como respuesta irónica a la solicitud.
La carta documento enviada por los abogados de Flybondi acusaba a los creadores del sitio de infringir sus derechos sobre la marca registrada “Flybondi” y “La libertad de volar”, alegando que el uso no autorizado de su nombre constituía una infracción y competencia desleal. Los abogados de la aerolínea exigieron que en 24 horas los desarrolladores dejen de utilizar las marcas de Flybondi, o se tomarían acciones legales.
Como respuesta a la creciente atención que había generado el sitio, Flybondi trató de reivindicarse publicando un tuit en el que afirmaba que, en el período del 7 de diciembre de 2024 al 7 de enero de 2025, había operado más de 2.600 vuelos con un 99,35% de “regularidad de vuelos”. Sin embargo, este término fue interpretado por muchos como una maniobra para evitar hablar sobre las constantes reprogramaciones y cancelaciones que han sido motivo de críticas de los usuarios.