El Congreso de los Estados Unidos inició su 119ª legislatura en enero, con la toma de posesión de Donald Trump como presidente y JD Vance como vicepresidente. Trump reafirmó su compromiso con la agenda “Estados Unidos Primero” en su discurso inaugural. El presidente recibe un salario de 400,000 dólares anuales, además de asignaciones para gastos oficiales y viajes. Vance, por su parte, percibirá 235,100 dólares anuales debido a una congelación salarial hasta 2025.
Los líderes del Congreso también tienen salarios elevados, con Mike Johnson, presidente de la Cámara de Representantes, ganando 223,500 dólares al año. Los funcionarios del gabinete presidencial recibirán salarios superiores a los 200,000 dólares. El comienzo de esta nueva administración marca una era de colaboración entre el Ejecutivo y el Legislativo, con el objetivo de implementar políticas centradas en los intereses nacionales bajo el lema “Estados Unidos Primero”.