Hasta ahora solo dos fueron detenidos. Bolsonaro presiona para que Milei los proteja.
El juez federal Daniel Rafecas ordenó la aprehensión contra 61 bolsonaristas que se encontraban prófugos y condenados por participar el intento de golpe de estado del 8 de enero de 2023.
En junio, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil había recibido una lista con más de 180 nombres de prófugos en Argentina y otros países, como Paraguay y Uruguay.
La Policía Federal dijo entonces que los acusados de participar en los ataques a la sede de los Tres Poderes ingresaron a la Argentina y solicitaron refugio en el país. La fuga fue una forma de eludir las órdenes de detención emitidas por el Supremo Tribunal Federal (STF) contra los investigados. Desde entonces, piden asilo político en el país con el apoyo de Jair Bolsonaro, en la idea que su extrema cercanía política al presidente Milei los ayude.
La Corte de Brasil ordena la extradición de los prófugos bolsonaristas y agrega presión sobre Milei La decisión de Rafecas pone en tensión a Milei a horas de compartir con Lula la cumbre del G20 en Río. Milei y Karina tienen una estrechísima relación personal y política con Bolsonaro y sus hijos como parte de su esquema de relaciones de ultraderecha en la región. Incluso han compartido estratega digital: Fernando Cerimedo, dueño de la Derecha Diario, trabajó en las campañas de ambos y también enfrenta una investigación penal de la Corte Suprema de Brasil por impulsar fake news destinadas a socavar el orden constitucional.
Hasta el momento, el gobierno de Milei evitó involucrarse de lleno en la causa de los bolsonaristas prófugos en el país e incluso la ex canciller Diana Mondino nunca quiso reunirse reunirse con uno de los abogados de los prófugos, tal como adelantó
En junio de este año, Manuel Adorni, afirmó que no había “pactos de impunidad” y que el país respetaría las decisiones del Poder Judicial brasileño “como respetamos toda decisión judicial”.