Los crímenes pasaron de 260 en 2023 a 90 en 2024. Las variables que explican la caída.
En 2024, Rosario alcanzó una disminución histórica de homicidios, con solo 90 casos registrados, lo que representa una caída del 65% respecto al año anterior. Esto marca un cambio radical desde 2022, cuando los crímenes llegaron a un pico de 290. Esta notable reducción de la violencia letal es atribuida al primer año de gobierno de Maximiliano Pullaro, quien implementó un plan de seguridad integral con coordinación entre fuerzas provinciales y federales, y un enfoque directo en los barrios más conflictivos.
Las políticas adoptadas incluyeron un mayor control en las cárceles, reformas legislativas y un aumento en la presencia policial en zonas clave. Aunque las estadísticas reflejan una mejora significativa, las autoridades se mantienen cautelosas, reconociendo que la violencia, especialmente entre jóvenes y en sectores vulnerables, sigue siendo un desafío persistente
