La Gendarmería Nacional desarticuló una importante operación de contrabando en la provincia de Misiones tras el hallazgo de dos vehículos cargados con más de 50.000 atados de cigarrillos de origen ilícito. El operativo, que se produjo en la localidad de Puerto Rico, representa un duro golpe a las redes criminales que operan en la frontera y evade los controles fiscales, afectando directamente las arcas del Estado.
Los vehículos, una camioneta Ford Ranger y un automóvil Ford Fiesta, fueron abandonados por sus ocupantes al advertir la presencia de efectivos de la Fuerza de Tarea de Misiones. Los contrabandistas se dieron a la fuga en una zona de densa vegetación, aprovechando la oscuridad de la noche, lo que impidió su captura. Dentro de los rodados, los agentes descubrieron un total de 50.400 atados de cigarrillos de la marca “Rodeo”, un valor que supera los 42 millones de pesos, de acuerdo con estimaciones oficiales.
Este tipo de contrabando no solo genera una significativa pérdida fiscal para el país, sino que también financia otras actividades ilícitas y representa una competencia desleal para la industria tabacalera local. Según informes de la Dirección General de Aduanas, el contrabando de cigarrillos ha crecido exponencialmente en los últimos años, con Misiones y la provincia de Corrientes como principales puntos de entrada desde Paraguay.
La mercadería y los vehículos fueron incautados y puestos a disposición del Juzgado Federal de la ciudad de Posadas y la Fiscalía Federal, que ahora lideran la investigación para identificar a los responsables y determinar la conexión de este cargamento con redes más amplias de criminalidad organizada. Los investigadores analizan huellas y otros indicios encontrados en los vehículos para trazar el recorrido y el destino final de la mercadería.
El hecho pone de manifiesto la compleja dinámica de seguridad en las zonas de frontera, donde los esfuerzos por combatir el narcotráfico y el contrabando se entrelazan. Las autoridades de seguridad refuerzan su compromiso con operativos de control en rutas y pasos ilegales para desbaratar estas operaciones antes de que los productos lleguen a los centros de distribución clandestinos en las grandes urbes.
Expertos en seguridad fronteriza señalan que el abandono de los vehículos y la huida de los implicados son tácticas comunes para evitar la detención, dejando el cargamento como una pérdida asumida por las organizaciones. La operación exitosa de Gendarmería es un recordatorio de la constante vigilancia que las fuerzas de seguridad deben mantener para proteger la economía nacional y combatir el crimen transnacional.





