26.4 C
Resistencia
spot_img

Estabilidad preelectoral bajo condición: Los mercados se acomodan al ‘nuevo status’ y aguardan la letra chica del auxilio de EEUU

Date:

Compartir:

El mercado de capitales argentino se encuentra en una fase de reacomodo tras el anuncio del Tesoro de Estados Unidos sobre una inédita asistencia financiera para estabilizar la moneda local, lo que ha generado una pax cambiaria antes de las próximas elecciones. La volatilidad extrema de las semanas anteriores ha cedido, y la coincidencia entre consultoras es que el apoyo norteamericano ha tranquilizado al mercado, aunque advierten que esta estabilidad está “condicionada al resultado electoral” y a los anuncios que se hagan sobre el alcance y los mecanismos de la ayuda.

La intervención del Tesoro estadounidense, que incluyó la compra de pesos en el mercado, revirtió momentáneamente las expectativas devaluatorias que habían llevado al dólar mayorista a tocar el techo de la banda cambiaria en septiembre. Este “salvataje financiero” impulsó inicialmente los activos, con saltos significativos en acciones y bonos. Sin embargo, los operadores se muestran cautelosos: la jornada del viernes pasado, feriado en Argentina, mostró una toma de ganancias en los ADRs (certificados de acciones argentinas en Wall Street) y una suba del riesgo país, indicando que el optimismo se modera ante la ausencia de anuncios concretos.

Interrogantes sobre el Esquema Cambiario y la Deuda

El “nuevo status” del mercado se basa en la expectativa de que el Tesoro norteamericano seguirá brindando soporte para evitar que el peso se deprecie fuertemente. El ministro de Economía, Luis Caputo, confirmó este fin de semana que el gobierno de EEUU “está dispuesto a seguir comprando pesos” y que se podría incluso intervenir en el dólar financiero y de futuros. No obstante, en la city persisten las dudas sobre la continuidad del esquema de bandas cambiarias en el mediano plazo y la presión sobre las reservas netas del BCRA.

El mercado también está atento a la letra chica del acuerdo, particularmente en lo que respecta a la deuda y las cuentas externas. Según informes de consultoras económicas, “encarrilado el tema fiscal, la discusión macroeconómica se centra sobre las cuentas externas”. Los inversores esperan detalles sobre si la ayuda incluirá mecanismos de financiación o respaldo para los próximos vencimientos de deuda, y si se facilitará la acumulación genuina de reservas, un factor clave para la sostenibilidad económica post-electoral.

En el corto plazo, los mercados financieros operan con la hipótesis de una estabilidad cambiaria contenida hasta las elecciones, gracias al “mensaje contundente” de Washington a los especuladores. El riesgo reside en que la tranquilidad actual es exógena, es decir, generada por el apoyo externo, y no por la consolidación de fundamentos económicos internos. Esto hace que el mercado sea hipersensible a cualquier indicio de falta de continuidad en la política económica o a un resultado electoral que genere incertidumbre sobre la alianza con Estados Unidos.

La estabilidad actual es un frágil armisticio. El mercado se encuentra en una pausa expectante, con la mirada puesta en Washington y en el desenlace electoral del país. El desafío inmediato será mantener la calma cambiaria ante el feriado en EEUU de este lunes, que podría limitar las operaciones de soporte. En el mediano plazo, la clave será que el Gobierno convierta este “salvataje” en un plan creíble de largo aliento, que reduzca la dependencia del soporte geopolítico y ancle las expectativas de los inversores en la solvencia económica del país.

spot_img